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Informes de sustentabilidad: herramientas de comunicación y reputación

Tres expertos ofrecen a las compañías su orientación para abordar con éxito la creciente necesidad de presentar informes de sostenibilidad empresarial.

En América Latina, muchas compañías de la industria de empaques han adoptado modelos de divulgación de su desempeño sostenible.
En América Latina, muchas compañías de la industria de empaques han adoptado modelos de divulgación de su desempeño sostenible.
Getty Images

Los informes de desempeño ambiental, de gestión social y de gobernanza (ASG), ampliamente conocidos como informes de sustentabilidad empresarial, son instrumentos fundamentales para generar confianza, mitigar riesgos y aprovechar oportunidades en un mundo cada vez más preocupado por la sustentabilidad.

En la industria del empaque, la gestión de sustentabilidad ambiental se ha vuelto fundamental. Es crucial no solo por su impacto en el medio ambiente y en la sociedad, sino para la reputación y competitividad de las empresas. En América Latina, este compromiso se está fortaleciendo y las empresas de la región están buscando activamente formas de integrar prácticas sustentables en sus operaciones y comunicar acerca de ellas.

El caso colombiano de informes de sustentabilidad

En Colombia, por ejemplo, la importancia de los informes de sustentabilidad ha sido reconocida a nivel gubernamental. Recientemente, se implementó en el país suramericano una regulación que les exige a ciertas empresas de la industria manufacturera la presentación de reportes anuales que reflejen su desempeño en esta área. Aunque puede resultar un desafío inicial, también brinda una oportunidad para mejorar prácticas y demostrar su compromiso empresarial.

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Billy Escobar Pérez, Superintendente de Sociedades de Colombia, afirmó en un foro de orientación para las empresas sobre la nueva norma que “la sostenibilidad no es solo un asunto normativo, es el deber ser en el mundo empresarial de hoy”. El funcionario explicó como la responsabilidad social es una impronta que deben tener todas las empresas del mundo. “Incluso para hablar de su prestigio el referente básico es la sostenibilidad, que va mucho más allá de lo ambiental para incluir una serie de otros componentes que terminan en el ser humano”, señaló.

Informes de sustentabilidad en Latinoamérica

En América Latina, muchas compañías han adoptado modelos voluntarios de divulgación de su desempeño sostenible. Sistema B, por ejemplo, una organización sin fines de lucro, promueve el desarrollo de empresas que contribuyan a la construcción de una nueva economía, en la que el éxito y los beneficios financieros incluyan el bienestar social y ambiental. Camilo Ramírez, director ejecutivo de Sistema B Colombia, señala que la sostenibilidad se ha convertido en un tema central para las organizaciones en todo el mundo. “Las empresas que han sido pioneras en la implementación de reportes de sostenibilidad y han obtenido certificaciones, como la B, se encuentran en una posición ventajosa. Estas prácticas no solo mejoran la imagen de la empresa ante consumidores e inversores, sino que pueden resultar en una menor rotación laboral y una preferencia por parte de los consumidores”.

Camilo Ramírez, director ejecutivo de Sistema B Colombia.Camilo Ramírez, director ejecutivo de Sistema B Colombia.

En la industria del empaque, que enfrenta diversas presiones y escrutinios, la presentación regular de informes de sostenibilidad es esencial. En primer lugar, brinda transparencia sobre las prácticas empresariales y su impacto en el medio ambiente y la sociedad. Esta transparencia es crucial para construir y mantener la confianza de los distintos grupos de interés, y también ayuda a identificar áreas de mejora y oportunidades de innovación, lo que puede impulsar la eficiencia operativa y la rentabilidad a largo plazo.

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¿Cómo divulgar la sustentabilidad empresarial?

En la actualidad, las empresas que desean elaborar informes de sostenibilidad cuentan con diversas opciones. Una alternativa es seguir estándares internacionales reconocidos, como el Global Reporting Initiative (GRI) o el Sustainability Accounting Standards Board (SASB), entre otros ampliamente utilizados en la industria. Estos marcos ofrecen directrices claras y coherentes para la elaboración de los reportes, lo que facilita la comparación entre empresas y sectores. Asimismo, algunos países latinoamericanos están creando sus propios marcos, adaptados a las necesidades y realidades regionales.

Los actuales programas de reporte del desempeño ambiental, social y de gobernanza corporativa (ASG) se centran en analizar las prácticas de la empresa para garantizar la coherencia entre las palabras y las acciones. Es fundamental considerar detenidamente cada uno de sus elementos clave durante su desarrollo.

Medio ambiente: Una parte importante de los informes ASG se centra en evaluar el impacto ambiental de las empresas. Además del cambio climático, esta categoría incluye aspectos como la gestión de los empaques, consumo de energía, la contaminación, el manejo del agua y otros factores ambientales relevantes.

Social: El aspecto social de los informes ASG se enfoca en cómo una empresa trata a las personas, tanto internamente como en las comunidades donde opera. La diversidad, equidad e inclusión, salud y seguridad laboral, gestión de relaciones con la comunidad y privacidad de los datos son aspectos clave de esta dimensión.

Gobierno corporativo: El componente de gobernanza en el ámbito de los ASG se refiere a las prácticas, controles y procedimientos organizativos utilizados para garantizar decisiones efectivas, cumplimiento normativo y satisfacción de las partes interesadas. Incluye la prevención de fraudes, lucha contra el soborno, liderazgo ejecutivo, ética empresarial y transparencia financiera, entre otros aspectos relevantes.

Obligación de presentar informes de sostenibilidad ¿Cuáles son los desafíos? 

En el contexto de la obligación de presentar informes de sostenibilidad, muchas empresas latinoamericanas se enfrentan a varios desafíos en su elaboración. Estos retos abarcan factores culturales, económicos y regulatorios. En la región, la consciencia sobre la sostenibilidad está en aumento, aunque aún no está tan arraigada como en otras partes del mundo. Además, algunas empresas pueden tener limitaciones financieras y de recursos para implementar prácticas sostenibles y elaborar informes detallados al respecto. Por otro lado, la falta de regulaciones claras y exigentes puede llevar a que algunas empresas no consideren los informes de sostenibilidad como una prioridad.

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Para superar estos desafíos y otros, es crucial fomentar un cambio cultural dentro de las empresas. Esta transformación implica educar a todos los niveles de la organización sobre la importancia de la sostenibilidad y cómo su implementación puede beneficiar tanto al negocio como al planeta. “La creación de departamentos dedicados a la sostenibilidad y la integración de prácticas sostenibles en la estrategia empresarial son pasos fundamentales en este proceso”, explica Camilo Ramírez. “Colaborar con organizaciones como Sistema B puede proporcionar a las empresas las herramientas y el conocimiento necesarios para avanzar en su camino hacia la sostenibilidad”, añade.

Ramírez identificó como uno de los principales desafíos la falta de preparación y conocimiento sobre cómo implementar estrategias de sostenibilidad efectivas. Muchas empresas aún se encuentran en etapas iniciales, utilizando herramientas básicas para medir su impacto, lo que indica una necesidad de desarrollo en talento y tecnología especializada. Además, la sostenibilidad no se percibe en muchos casos como un tema de esencial en las juntas directivas, lo que limita su integración en la estrategia empresarial general.

Rentabilidad y sustentabilidad sí son compatibles

La rentabilidad representa también un serio obstáculo en el camino de la sostenibilidad empresarial, aunque casos como el de Plastilene, una empresa convertidora de empaques líder en el sector de plásticos en América Latina, ha demostrado que con una estrategia bien definida y un compromiso genuino es posible superar estos desafíos y transformarlos en oportunidades de crecimiento y diferenciación en el mercado. “Nuestra empresa ha logrado no solo reducir su impacto ambiental, también fortalecer su marca y fomentar la lealtad de los clientes, quienes valoran cada vez más las prácticas empresariales responsables”, comenta Ricardo Estrada, vicepresidente de Sostenibilidad y Compras Globales en Plastilene.

Una visión similar es la que comparte Ximena Marín, socia cofundadora de BA+, una firma de direccionamiento estratégico que les ayuda a las empresas a transitar el camino hacia la sostenibilidad. Ximena asegura que las empresas deben adoptar una mentalidad abierta y de liderazgo para integrar la sostenibilidad en sus operaciones y reportes. “En un comienzo esto puede ser visto como un desafío, pero en realidad representa una oportunidad para mejorar procesos y generar ahorros”.

Ximena Marín, cofundadora de BA+.Ximena Marín, cofundadora de BA+.

El valor de la buena reputación empresarial

La adopción de prácticas sostenibles abre para las empresas un abanico extenso de oportunidades, relacionadas de manera directa con claridad en la divulgación de su desempeño y de sus impactos sobre la sociedad y el medioambiente. “La transparencia, impulsada por la demanda de los consumidores y las regulaciones gubernamentales, se ha convertido en un valor altamente apreciado”, asegura el director ejecutivo de Sistema B Colombia.

En una empresa como Plastilene, la orientación hacia la sostenibilidad no solo fortaleció su posición como líder en el sector, además ha abierto puertas a nuevas oportunidades de negocios y ha mejorado su relación con clientes y otros grupos de interés. “Hemos establecido compromisos sostenibles que abarcan desde el impacto ambiental hasta la responsabilidad social, demostrando que una gestión integral y responsable es posible y beneficiosa para el negocio”, afirma con seguridad Ricardo Estrada al referirse al impacto de esta trayectoria, emprendida por la empresa desde hace varios años.

La implementación de prácticas sostenibles ha tendido para Plastilene un efecto multiplicador a lo largo de toda la cadena de valor. Al adoptar un enfoque sostenible, la empresa no solo mejora sus propios procesos y productos, también influye en sus proveedores, clientes y socios para que adopten prácticas más responsables. “Este liderazgo, por ejemplo, fomenta un cambio positivo en la industria, promoviendo un enfoque más integrado y consciente hacia la sostenibilidad”, explica Estrada. La empresa, de acuerdo con su vicepresidente de Sostenibilidad y Compras Globales, enfrenta los retos legislativos y de regulación con una visión optimista, viendo estas exigencias como oportunidades para demostrar su compromiso con prácticas responsables y para diferenciarse en el mercado.

Las prácticas sostenibles pueden mejorar la eficiencia operativa

Una visión coincidente es la de Ximena Marín, quien destaca cómo la adopción de prácticas sostenibles tiene profundas repercusiones, ya que mejora la eficiencia operativa y fortalece las relaciones externas de la empresa. “Al trabajar con proveedores que también se comprometen con la sostenibilidad, una empresa puede asegurar la coherencia en su mensaje y prácticas. Además, al comunicar abiertamente sus esfuerzos y logros, se puede construir una mayor confianza y lealtad entre con clientes y otros grupos de interés”.

La ejecutiva de BA+ enfatiza que la integración de la sostenibilidad en las operaciones de una empresa tiene un impacto positivo en el medio ambiente y la sociedad, y puede influir favorablemente en su desempeño financiero. “Las prácticas sostenibles pueden llevar a una reducción de costos a través de la eficiencia energética y la minimización de residuos, así como a la apertura de nuevos mercados y la fidelización de clientes. Además, los inversores y las entidades financieras están cada vez más interesados en empresas que demuestran un compromiso con la sostenibilidad, lo que puede resultar en mejores condiciones de financiamiento y una valoración más alta en el mercado”.

Recomendaciones para elaborar informes de sostenibilidad

Para las empresas latinoamericanas que desean mejorar sus informes de sostenibilidad, es crucial adoptar un enfoque integral y transparente. Esto implica cumplir con las regulaciones vigentes, y explorar oportunidades para ser líderes en sostenibilidad. Asimismo, es fundamental involucrar a todas las partes interesadas pertinentes, como empleados, proveedores y comunidades locales, en el proceso de elaboración.

En este camino es valioso el uso de perspectivas y herramientas que faciliten una exitosa implementación. Ximena Marín enfatiza que para abordar de manera efectiva la integración de la sostenibilidad en su modelo de negocio, las empresas deben comenzar por entender las tendencias y referentes globales en sostenibilidad, así como considerar certificaciones como Empresa B para medirse en distintas dimensiones. Marín sugiere que es importante conectar con comunidades y programas que trabajan en sostenibilidad, y buscar asesoramiento externo que conozca la industria y pueda integrar la sostenibilidad de manera efectiva en la operación.

El rol de la tecnología hacia prácticas sostenibles

La tecnología juega además un papel crucial en la transición hacia prácticas más sostenibles. En el caso de la industria del empaque, el desarrollo de nuevos materiales degradables, la implementación de sistemas de gestión de residuos más eficientes, o la innovación tecnológica pueden ofrecer soluciones efectivas a los desafíos ambientales que enfrenta el sector. “Invertir en investigación y desarrollo, así como en la adopción de tecnologías emergentes, es esencial para que las empresas usuarias y fabricantes de empaques se mantengan competitivas y contribuyan a un futuro más sostenible”, asegura Camilo Ramírez.

En el acompañamiento a la presentación de informes de sostenibilidad, los expertos recomiendan comenzar por definir claramente el propósito detrás de su elaboración. Una vez establecido el propósito central, que puede ir desde reflejar los valores de la empresa, influir en las partes interesadas o cumplir con requisitos regulatorios, resulta fundamental identificar las partes interesadas prioritarias y determinar qué información es la más relevante y efectiva para estas.

En el paso siguiente, deben seleccionarse cuidadosamente las métricas pertinentes que estén alineadas con los valores y estrategias de la empresa, garantizando que puedan ser sometidas a la evaluación pública. Posteriormente, es clave utilizar metodologías eficientes para recopilar, analizar y comunicar los datos de manera precisa y eficiente. Finalmente, se deben establecer procesos de información continua mediante el desarrollo de políticas, procedimientos y controles para mantener la coherencia y la precisión en los informes ASG a lo largo del tiempo.

Ricardo Estrada, vicepresidente de Sostenibilidad y Compras Globales en Plastilene.Ricardo Estrada, vicepresidente de Sostenibilidad y Compras Globales en Plastilene.

Alinear acciones de sostenibilidad con el eje del negocio, la clave

En cualquier caso, y como una orientación esencial, el camino hacia la sostenibilidad debe ser consciente y basado en la convicción de generar un impacto social y ambiental positivo. Ricardo Estrada, sugiere de manera clara abordar estos desafíos de manera ordenada y dirigida, maximizando los recursos disponibles y alineando las acciones de sostenibilidad con el eje del negocio. Estrada enfatiza además la importancia de contar con asesoramiento experto para desarrollar estrategias y reportes bien fundamentados.

La divulgación transparente del desempeño en las esferas ambiental, social y corporativa es una herramienta poderosa de validación para las empresas que buscan cumplir con la legislación vigente e ir más allá en su compromiso con prácticas responsables. “Estos estándares proporcionan un marco de referencia que facilita la medición y comunicación del desempeño sostenible de una compañía, permitiendo comparaciones y mejoras continuas”, concluyó Ximena Marín en entrevista con Mundo EXPO PACK.