Antes de que termine el primer semestre de este año, los propietarios de marca y los productores de empaques flexibles tendrán en sus manos una valiosa herramienta que les ayudará a avanzar en el camino de la sostenibilidad: las directrices contenidas en el manual “Designing for a Circular Economy Guidelines”, que reúne los aportes de las empresas y asociaciones participantes en el consorcio CEFLEX.
CEFLEX es la iniciativa de colaboración del Consorcio Europeo de empresas y asociaciones que representan toda la cadena de valor de los envases flexibles en el viejo continente. Su misión es mejorar aún más el rendimiento de los envases flexibles en la economía circular mediante el diseño y el avance de mejores soluciones de sistema identificadas a través de la colaboración de empresas que representan a toda la cadena de valor.
Como visión CEFLEX tiene que, para 2020, el empaque flexible cuente con una hoja de ruta integral de sostenibilidad y economía circular, incluidas pautas de diseño ampliamente reconocidas y un enfoque sólido para medir, demostrar y comunicar el valor significativo que este tipo de empaque agrega a la economía circular.
La hoja de ruta abordará:
· Eficiencia de recursos
· Beneficios de prevención de residuos
· Devolución sostenible de materiales de empaques flexibles reciclados para abastecer a los mercados finales identificados
· Eliminación de fugas
Y para 2025 CEFLEX propone tener una infraestructura de recolección, clasificación y reprocesamiento establecida desarrollada los flexibles posconsumo en toda Europa, basada en tecnologías y procesos de fin de vida útil que brinden el mejor resultado económico, técnico y ambiental para una economía circular.
En la iniciativa CEFLEX, de la que hacen parte más de 140 aliados de cadena completa de suministro de las industrias de procesamiento y empaque, Syntegon Technology, conocida antes como Bosch Packaging Technology, ha contribuido con información y asesoramiento en temas relacionados con los procesos de producción, derivados de su amplia experiencia en la fabricación de equipos y maquinaria para empaque. Su aporte se orienta a hacer compatibles los requerimientos de la sostenibilidad con los de la eficiencia, y a potenciar el uso y la capacidad de los materiales sostenibles de ser procesados. Un caso es el de las tareas de sellado en las que, dependiendo del material utilizado, su duración puede variar significativamente, lo que afecta la productividad y la eficiencia general de los equipos. “Vemos un potencial considerable por ejemplo en las monopoliolefinas y en otros monomateriales”, señaló Matthias Klauser, líder del proyecto y experto en sostenibilidad de Syntegon Technology.
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En la presentación del compromiso de Syntegon Technology con el proyecto de CEFLEX, se destacó la necesidad de que los proveedores de tecnologías de procesamiento y empaque adapten sus tecnologías para facilitar la implementación de las directrices contenidas en el nuevo manual de diseño, lo que incluye la capacidad de hacer que los nuevos materiales se puedan procesar en los equipos existentes y el desarrollo de nuevas tecnologías de máquina que se ajusten a todos los tipos que existen hoy y a los que se desarrollen en un futuro.
Las directrices especiales para la producción de empaques flexibles desarrolladas por la iniciativa CEFLEX se aprobaron luego de varias rondas de aportes y de consultas con los participantes, y su lanzamiento se ha previsto para la primavera de este año. “Los empaques sostenibles necesitan ser a la vez reciclables y procesables”, afirmó Matthias Klauser. “Y nosotros, con nuestra larga experiencia, podemos ayudar a allanar el camino a un modelo de economía circular que deje espacio para la eficiencia en la producción”.
Syntegon Technology es un proveedor mundial de procesos y tecnología de envasado. Anteriormente, la división de envases del Grupo Bosch, la compañía, con sede en Waiblingen (Alemania), ha ofrecido soluciones completas para las industrias farmacéutica y alimentaria durante más de 50 años. Más de 6.100 empleados en 30 ubicaciones en más de 15 países generaron un ingreso total de 1.300 millones de euros en 2019.
El portafolio de tecnologías inteligentes y sostenibles incluye máquinas independientes, así como sistemas y servicios completos. Los campos de aplicación en la industria farmacéutica son la producción, procesamiento, llenado, inspección y envasado de productos farmacéuticos líquidos y sólidos (por ejemplo, jeringas y cápsulas). En la industria alimentaria, su portafolio incluye tecnología de proceso para productos de confitería, así como soluciones de envasado para alimentos secos (por ejemplo, barras, productos de panadería y café), alimentos congelados y productos lácteos.
